En las aulas de infantil verás a los niños jugando, experimentando y manipulando.
A través del desarrollo de proyectos y con la ayuda de nuestras mascotas, se aproximarán a su entorno (salud, alimentación…), viajarán a países muy lejanos (Japón, Kenia, México…) y también conocerán civilizaciones antiguas (Incas, Romanos, exploradores…).
¡Anímate a descubrirlos con nosotros!
Cada mañana, proponemos a nuestr@s alumn@s diferentes espacios desde los que desarrollar las inteligencias múltiples. En el aula, se estimula el autoconocimiento, se promueve el trabajo cooperativo y se facilitan estrategias metacognitivas siguiendo el proyecto iCrezco.
Favorecemos la autonomía, la toma de decisiones y la organización del tiempo en función de sus intereses y habilidades. Este modelo, abierto y flexible, nos permite conocer los intereses de los alumnos y conjugarlos con los contenidos curriculares.
En nuestro colegio, abrimos las puertas de las aulas a la creatividad.
Nuestro modelo educativo se basa en la Teoría de las Inteligencias Múltiples, que fomenta las capacidades cognitivas de las personas, identificando el conjunto de inteligencias básicas que poseemos todos en mayor o menor medida: Lingüística, viso-espacial, lógico-matemática, naturalista, intrapersonal, musical, cinestésico-corporal e interpersonal.
¡Todos somos diferentes!
Por eso trabajamos y jugamos por ESPACIOS INTELIGENTES y con esta metodología más activa, conseguimos que nuestro alumnado tenga un verdadero protagonismo en su aprendizaje, alcanzando cada vez mayor autonomía personal.
En el cole, aprenden a ser autónomos, libres, con confianza en sí mismos y en su entorno; con sus propias competencias para pensar y elaborar estrategias para la resolución de obstáculos, problemas y conflictos; personas abiertas y sensibles, comunicativas y solidarias.
Entre los principales objetivos de la acción educativa está la autonomía. Es fundamental para que el alumnado pueda buscar puntos de interés, planificar proyectos, imaginar posibilidades, aceptar las dificultades que aparecen, crear alternativas, asumir pequeñas responsabilidades y conocer ciertos límites.
Una actividad fundamental para el desarrollo integral de nuestro alumnado debido a que cultiva sus aspectos afectivos, sociales, intelectuales y motrices.
La psicomotricidad está muy presente en nuestro modelo educativo, ya que permite que los niños y niñas obtengan una mayor conciencia de su cuerpo en relación con su mente.
A través de esta disciplina, los más pequeños adquieren conocimientos tanto de sí mismos como del medio que les rodea.
El movimiento permite la interacción con el entorno, creando la conciencia del yo, de su cuerpo y de su mente, e integrando habilidades tanto personales como sociales.
